martes, 19 de mayo de 2020

La vacuna


La doctora Judy Mikovits en 1991 revoluciono el tratamiento del VIH / SIDA. Reveló, indica en entrevista a Mikki Willis, que el uso común de tejidos fetales humanos y animales estaba desatando plagas devastadoras de enfermedades crónicas. Por exponer sus secretos mortales, los secuaces de Big Pharma hicieron guerra contra la doctora Mikovits destruyendo su buen nombre, carrera y vida personal. Ahora, mientras el destino de las Naciones está en juego la doctora Mikovits está denunciando los nombres de aquellos detrás de la plaga de corrupción que pone toda la vida humana en peligro.

Mikki Willis: ¿Y luego te pusieron una orden de mordaza?

Judy Mikovits:  Durante cinco años, si llegaba a las redes sociales, si dijera cualquier cosa, encontrarían “nueva evidencia” y me volverían a encarcelar, fue una de las pocas veces que lloré porque sabía que no había evidencia la primera vez y cuando puedes desatar ese tipo de fuerza, forzar a alguien a la bancarrota que tiene un puntaje de crédito perfecto, para que no pudiera traer mis 97 testigos, que incluían a los jefes, Tony Fauci, Ian Lipkin, los jefes de salud pública y HHS, que habrían tenido que testificar que no hicimos absolutamente nada malo.

Mikki Willis: Entonces, ¿De qué te acusaron? Judy Mikovits: de nada. Mikki Willis: Pero estuviste en la prisión.

Judy Mikovits: Estuve en la cárcel sin cargos me llamaron una fugitiva de la justicia, sin orden judicial, literalmente me arrestaron fuera de la casa. Nuestros vecinos estaban mirando lo que estaba pasando aquí: registraron mi casa sin una orden judicial, literalmente aterrorizaron a mi esposo durante cinco días, le dijeron, “si no encuentras los cuadernos, si no encuentras el material”, que no estaba en mí poder si no que fue plantado en mi casa.

Mikki Willis: ¿Cómo si hubieses tomado propiedad intelectual del laboratorio?

Judy Mikovits: ¡Sí! La intención era dar la apariencia de que yo había tomado material confidencial, nombres y propiedad intelectual del laboratorio. Y podría demostrar fuera de toda sombra de duda que no lo hice. Los jefes de todo nuestro HHS coludieron y destruyeron mi reputación y el departamento de justicia y el FBI se sentaron sobre ello y mantuvieron el caso sellado, lo que significa que no puedes decir que hay un caso o tus abogados serán puestos en desacato al tribunal, por lo que ni siquiera puedes conseguir un abogado que te defienda, así que cada derecho de debido proceso legal se me fue quitando y hasta el día de hoy sigue siendo así. Yo no tengo libertades ni derechos constitucionales.

Mikki Willis: Pero has decidido enfrentarlo ahora que ha sido removida tu orden de mordaza.

Judy Mikovits: Sí, escribir in libro titulado, Plaga de la corrupción: Restaurando la fe en la promesa de la ciencia.

Mikki Willis: Entonces Anthony Fauci, el hombre que encabeza el grupo de trabajo pandémico estuvo involucrado en un encubrimiento… 

Dirigió el encubrimiento. Y, de hecho, a todos los demás se les pagó a lo grande, millones de dólares en fondos por Tony Fauci, por la organización de Tony Fauci, Instituto Nacional de Alergias Y enfermedades Infecciosas (NIAID).

Mikki Willis: Estos investigadores que cometieron fraude.

Judy Mikovits: Continúan hasta el día de hoy siendo pagados grandes sumas por el NIAID. Y todo el mundo está escuchando sus consejos sobre cómo manejar esta pandemia actual.

Mikki Willis: ¿Cómo sabemos que lo está diciendo es lo que necesitamos aprender?

Judy Mikovits: Lo que él dice es absoluta propaganda y el mismo tiempo de propaganda que ha perpetrado para a millones de 1984.

Comenzó realmente cuando tenía 25 años, fui parte del equipo que aisló el VIH de la saliva y la sangre de los pacientes de Francia donde Luc Montagnier (Premio Nobel) había aislado originalmente el virus. Este fue un estudio confirmatorio, pero Tony Fauci y Robert Gallo estaban trabajando juntos para hacer girar la historia de una manera diferente. En este momento, el doctor Ruscetti estaba fuera de la ciudad y Tony Fauci me dice: “Entendemos que tienes un documento escrito y queremos una copia del mismo”. Y le dije, sí, hay un artículo escrito y es confidencial. Y no, no te daré una copia. Comenzó a gritarme y luego dijo: “Danos el documento ahora mismo o serás despedida por insubordinación”. Y simplemente dije, estoy segura que cuando el doctor Ruscetti regrese, puedes tener esta conversación con él. Y así que Frank regresa varias semanas después y realmente es intimidado para el artículo a Fauci retiene la publicación del artículo durante varios meses mientras Robert Gallo escribe su propio artículo y toma todo el crédito y, por supuesto, patentes están involucradas.

Este retraso de la confirmación literalmente condujo a la propagación del virus, matando a millones. Pero estaba aún más enojado con el gobierno federal y la industria farmacéutica. Una persona que sintió la furia de Kramer fue el doctor Anthony Fauci de NIH. Llamó a Tony Fauci el Bernie Madoff de la ciencia. Todavía me angustia pensar que no sabía que mi trabajo en 1999 era algo que se había evitado desde 1983 y 1982 cuando se aisló el virus, el virus no tuvo que esperar hasta 1984 para ser confirmando. Piensa en cuántas personas, todo el continente africano perdió una generación a medida que el virus se propagó debido a la arrogancia de un grupo de personas e incluye a Robert Red Field, quien ahora es el jefe de los CDC, junto con Tony Fauci. Estaban trabajando juntos para tomar crédito y ganar dinero y tenían las patentes y lo adaptaron a la terapia con IL-2, que era absolutamente la terapia incorrecta. Y si eso no hubiera sucedido, millones no habrían muerto de VIH.

Mikki Willis: ¿Cómo puede cualquier persona que está dando consejos globales de salud, tener una patente en la solución de la vacuna? ¿No es un conflicto de intereses? ¿O no debería ser?

Judy Mikovits: Si es un conflicto de intereses. Y, de hecho, esta es una de las cosas que he estado diciendo y me gustaría decirle el presidente Trump: Derogue la ley Bayh-Dole.

Bay-Dole cambió fundamentalmente la forma en que las universidades abordan la transferencia de la tecnología.

Y se puede mejor en las estadísticas. Las universidades obtuvieron hoy 16 veces más patentes que en 1980. Ahora todos obtienen más patentes, pero aun así, la proporción de todas las patentes de las universidades en los EE.UU. en más de cinco veces superior antes de la ley de Bayh-Dole. La situación ha empeorado tanto que un oficial de la industria de tecnología de la información se ha referido públicamente a las universidades como, “adictos al crack”, impulsadas por “oficinas de trasferencia de tecnología de mente pequeña adictas a las regalías de patentes”.

Esa ley dio a los empleados del gobierno el derecho de patentar sus descubrimientos. Por lo tanto, para reclamar como propiedad intelectual los descubrimientos que los contribuyentes pagan. Desde que eso sucedió a principios de los años ochenta, destruyó la ciencia. Y esto permitió el desarrollo de esos conflictos de intereses. Y este es el crimen detrás de dejar a alguien como Bill Gates con millones de millones de dólares, nadie lo eligió, sin antecedentes o experiencia médicos pero dejamos que personas así tengan una voz en este país mientras destruimos la visa de millones de personas. La normalidad solo regresará cuando hemos vacunado a gran medida a toda la población mundial.

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